Situada en el norte de Italia, Brescia pertenece a Lombardía, siendo una de las ciudades más ricas en obras arquitectónicas, con una larga historia y enormes bellezas naturales. La ciudad está rodeada de verdes colinas y próxima al Lago de Garda. A continuación, vamos a ir viendo las principales cosas qué hacer y qué ver en Brescia.

Qué ver en Brescia

Brescia es una ciudad no muy conocida, eclipsada por Milán y los lagos que hay en los alrededores, pero que suele sorprender a todos los turistas que la visitan. No es muy grande lo que permite verla tranquilamente en uno o dos días máximo. Además al estar en el norte de Italia está muy bien conectada por tren y carretera. Veamos cuáles son sus principales monumentos y atracciones turísticas.

Piazza Loggia

La Piazza della Loggia, una de las plazas más bonitas de Brescia. Es la sede del poder civil, ya que es donde se encuentra el ayuntamiento. La plaza está rodeada por soportales, donde hay cafeterías para tomar un buen expreso. Además también nos encontramos con un reloj astronómico, muy parecido al que hay en Praga. En el entorno de la plaza podemos ver varios de los monumentos más importantes de la ciudad.

Catedral Vieja de Brescia

Tanto la nueva como la vieja están una junto a la otra. Muy diferentes entre sí, la Catedral Vieja de Brescia tiene un encanto especial. De planta circular, por eso recibe el sobrenombre de la Rotonda, la catedral se construyó en el siglo XI sobre  la Basílica de Santa María Mayor, y es de estilo románico.

Dentro podemos ver una estructura sorprendente y con varias joyas de interés, como su sepulcro del siglo XIII, varias tumbas de mármol rojo o la cripta en honor a San Filastrio. En el suelo también nos encontramos con los restos de varios mosaicos de la antiguo iglesia sobre la que se construyó.

La entrada es gratuita y el horario es de miércoles a domingo de 9:00 a 12:00 y 15:00 a 18:00.

Catedral Nueva de Brescia

La Catedral Nueva de Brescia tiene, después de San Pedro en Roma y Santa María en Florencia, la tercera cúpula más grande de Italia. Aunque tenga el nombre de nueva, se empezó a construir en 1604 por el arquitecto Giovanni Battista Marchetti. El templo se finalizó en el siglo XIX.

La fachada del templo es de estilo barroca, muy espectacular, contrastado con la sobriedad de románica de la catedral Vieja que está al lado. El interior está dividido en tres naves, separadas por columnas. Se puede entrar de manera gratuita de lunes a sábado de 7:30 a 12:00 y de 16:00 a 19:00, mientras que los domingos el horario es de 8:00 a 13:00 y de 16:00 a 19:00.

Palacio Broletto

Es otro de los edificios más singulares de la plaza. El Palacio del Broletto, es la sede del ayuntamiento. Tiene una planta de 100 metros de largo por 75 de ancho y el origen del edificio es el Palatium Novum Maius del año 1223, teniendo una mezcla de estilos ya que se ha ido reformando. durante todos estos años.

Tiene muros de piedra macizos de piedra, destacando de su fachada la torre de los Poncarali, de más de 19 metros de altura, aunque originariamente medías más de 30 años. Dentro está dividido en varios patios, donde entra el sol, iluminando todo el interior del Palacio.

Castillo de Brescia

El castillo de Brescia está situado en lo alto de una pequeña colina desde donde hay una panorámica de la ciudad, siendo una de las fortificaciones mejor conservadas de Italia y ejemplo de arquitectura militar medieval. Se fue construyendo a lo largo del siglo XV, bajo el dominio de la República de Venecia, aunque no se terminó hasta la época de dominación austriaca.

A día de hoy, el Castillo de Brescia sirve como sede de varios museos como el del Resorgimento y el de Armas. Además también es posible pasear por sus jardines y ver la ciudad de Brescia desde las alturas.

Biblioteca Queriniana

Se trata de uno los lugares más bonitos de toda Brescia. La Biblioteca Queriniana está justo al lado de la catedral de la ciudad y su estado de conservación es excelente. La biblioteca dispone de una sala de lectura espectacular, llena de frescos, una ornamentación del techo muy cuidada y una decoración hecha con maderas nobles. El horario de entrada es de martes a viernes de 8:45 a 18:00 y los sábados de 8:30 a 12:30.

Iglesia Santa María dei Miracoli

Ubicada en la calle Corso Martiri Della Libertá nos encontraremos la iglesia de Santa Maria dei Miracoli. La fachada es una obra de arte del renacimiento, donde podemos pasar horas observando los detalles de los faunos, ángeles y animales. El interior es bastante más grande de lo que parece por fuera, aunque debemos decir que no es tan llamativo como el exterior, por lo que se puede ver en 5-10 minutos y pasar al siguiente monumento.

Santuario Republicano

Otras de las paradas que tenemos que hacer en Brescia, es en el Santuario Republicano, que está dentro de la lista del Patrimonio de la Humanidad de la Unesco. Está debajo de la Plaza del Foro, ya que la ciudad se construyendo por capas sobre la antigua urbe romana.

Una de las cosas que más llama la atención son sus enormes puertas, que se asemejan a las de una cámara acorazada. Los mosaicos y frescos de este templo son del siglo I y tienen un estado de conservación magnífico.

Museo de Santa Giulia

La sede del museo está antiguo monasterio de Santa Giulia y también está en la lista de la UNESCO. En el interior podemos ver restos longobardos y lombardos de diferentes épocas. Además también contiene reliquias de la Brexia Romana, incluidos mosaicos y objetos de la época veneciana.
Para ver el museo con tranquilidad debemos destinar una hora y media. El horario de entrada es de martes a viernes de 10:00 a 18:00, sábado y domingo de 10:00 a 19:00, permaneciendo los lunes cerrados. El precio es de 12 euros.

Mapa de Brescia

Hoteles en Brescia

Brescia es un lugar excelente para dormir mientras visitamos Lombardía. Tiene una ubicación estratégica, cerca de Lago de Garda, Bérgamo o Milán, estando además muy bien conectada con ellas por tren o coche. En Brescia podemos dormir en el centro histórico para disfrutar de su ambiente o irnos un poro más a las afueras y estar más tranquilos. Os dejamos un buscador de Booking, donde encontrar las mejores ofertas.

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Cómo llegar a Brescia

Coche

Brescia está cerca de Milán y Verona, justo en la intersección entre Francia con Austria (de oeste a este) y Alemania con Roma (de norte a sur). Eso hace que la conexión por carretera sea muy buena, por lo que es muy cómodo ir en coche o autobús.

Está conectada por la autopista Brebemi al aeropuerto de Bérgamo, por la autopista A4 a Turín, Milán, Verona y Venecia, por la autopista A1 a ciudades del sur como Bolonia o Florencia y por la A7 a la zona de la Liguria.

Tren

Al igual que pasa con el coche, la ubicación también juega a favor de Brescia para llegar en tren. La línea que une Milán con Venecia hace parada en la ciudad, con trenes que van desde la alta velocidad hasta los regionales.

Avión

Brescia tiene aeropuerto propio a unos 15 kilómetros pero además, a menos de 100 kilómetros, tenemos el aeropuerto de Verona, el aeropuerto de Bérgamo y los dos aeropuertos de Milán, así que es cómodo poder llegar en avión a Brescia, y sobre todo, barato.

El tiempo en Brescia

Para viajar a Brescia la mejor época es entre abril y octubre, ya que el clima agradable y las precipitaciones no son muy abundantes. La máxima temperatura en Brescia es en julio y la mínima en enero. En invierno es posible incluso que nieve, por lo que si vamos en esta época es recomendable llevar ropa de invierno.

Otras ciudades cercanas a Brescia

Como ya hemos dicho, Brescia se encuentra en la región de Lombardía, muy cerca a la de Véneto, por lo que el número de ciudades cercanas que podemos visitar es enorme. Vamos a enumerar las que más merecen la pena:

• Lago di Garda a 46 km.
• Bérgamo a 52 km.
• Verona a 70 km.
• Milán a 104 km.
• Pavia a 116 km.
• Lago di Como 128 km.